6 frases para neutralizar a tu cuñado con sus propias armas.

La Navidad no sería lo que es sin los cuñados de turno haciendo gala de sus rancios conocimientos y capacidades.

Porque un buen cuñado es ese ser superior capaz de arreglar España en una tarde, el que conoce las mejores ofertas y el que podría haber preparado la mejor cena de nochebuena, pero no lo ha hecho porque no ha querido.

No sabemos si la cuñaditis tiene cura, pero hemos pensado que los de alrededor pueden llevarlo mejor si responden al cuñado como lo haría él mismo.

Por eso , hemos encencido el cuñadómetro y hemos detectado estas 6 frases propias de él con las que podrás atajar la mayoría de sus improperios y, de paso, llevar mejor las fiestas.

– Ya ves, la culpa es del coletas

Uno de los focus de tu cuñado será lo mal que va el país, lo mal que va el deporte, lo mal que va la economía, la política…No lo dejes teorizar. Ni se te ocurra intentar razonar. Busca un culpable y dile lo que quiere oír. Le dejarás contento y darás por finalizada la conversación. Todos ganan.

Ejemplos:

-Mira, ¿ves? Este móvil chino 200 euros y es mejor que tu AIFON. – Ya ves, la culpa es del coletas

-¿Cómo en el paro? Pues trabajo hay, ¿eh? Lo que pasa que a todos nos gusta tocarnos los huevos. – Ya ves, la culpa es del coletas

– Si fuera yo presidente, arreglaba España en una tarde.

Si ves que tu cuñado, por alguna extraña razón, no consigue dar con la clave para los problemas del país, puedes postularte tú como candidato para arreglar los problemas de España y ganarte su amor eterno para siempre. Por ejemplo:

-¿Pero esto qué es? ¡Cuánto daño ha hecho Masterchef! -Si fuera yo presidente arreglaba España en una tarde.

– Si es que como se vive en España en ningún lao.

Puede también darse el caso contrario, y que el país no tenga ningún problema. Todo marcha como la seda y eso es motivo de alegría. Házselo saber a tu cuñado como lo haría él:

-Qué crisis ni qué crisis, si están todos los bares llenos. -Si es que como se vive en España en ningún lao.

-Pero sobre todo diles que vas de mi parte, ¡qué si no no te hacen descuento! -Si es que como se vive en España en ningún lao.

– A mí me educaron así

Va a ser su excusa para cualquier cosa que tú le puedas achacar. Asique, ¿por qué no también la tuya? Algunas ocasiones en las que la puedes usar:

-¿Otro año sin novia? No pillas ni pagando. Es que la juventud de hoy estáis agilipollaos. – A mí me educaron así.

-Serás de Podemos, pero bien que te gusta el jamón bueno. – A mí me educaron así.

– Eso es como todo

Eso es como todo. La frase indeterminada por excelencia. Pero que, por alguna extraña razón, tiene la capacidad de aparecer en una conversación sin aportar absolutamente NADA. Úsala con sabiduría para aliñar las charlas con tu cuñado:

-La lotería es el impuesto de los tontos. – Eso es como todo

-Jesús no nació el 25 de Diciembre, nació en primavera. – Eso es como todo

-Por el mismo precio se lo digo a un amigo y nos traen la gamba fresca y no estas, que son congeladas. – Eso es como todo

– ¡Sube el volumen que va a hablar el rey!

Una frase socorrida para cuando tu cuñado intente colgarse medallas y dar rienda suelta a su fanfarronería. Solo podrás pararle invocando a un ser superior (al menos en su escala moral).

-¿Te ha costado mucho aparcar? Pues yo lo he aparcado en la puerta a la primera. -¡Sube el volumen que va a hablar el rey

-Yo me hago un Madrid-Barcelona en tres horas y sin pisarle mucho. -¡Sube el volumen que va a hablar el rey!

Teniendo en mente estas frases estarás vacunado  y prevenido para los improperios que pueda soltar tu cuñado en estas fiestas. Así que concéntrate en pasarlo bien, comer rico y beber (con moderación).